Mis queridos amigos y hermanos,

¿Sabían que nuestro planeta contiene más de mil millones de litros de H2O (agua), pero poca se puede tomar?- Más del 97% del agua en la Tierra es salada. Dos tercios o 0.67 % del agua dulce está retenida en glaciares y capas de hielo polar. Esto deja a los seres vivos con solo un 2.33%, de agua dulce, pero esto no significa que ese porcentaje está disponible para el consumo, ya que la mayor parte está atrapada en el suelo o en acuíferos subterráneos. Por lo tanto, los seres vivos, sólo tenemos una fracción muy mínima para nuestro consumo y disposición.
Todos los seres vivos, sin excepción, necesitan de agua para poder vivir; y no obstante, los seres humanos no sólo la utilizan para tomar: casi todo lo que hacemos involucra el agua de alguna manera.
El hombre, al ser creado con inteligencia, es el mayordomo o administrador de este preciado líquido. “Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y le puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase.” (Génesis 2:15). Como podemos observar del versículo bíblico, esa misión que le otorga Dios al hombre, “ser el mayordomo de la naturaleza”, lo compromete a cuidar de ella y le da también, la facultad de decidir con los elementos que la forman; por consiguiente, es una responsabilidad que al hombre no acatar como debe, transgrede los principios divinos, y por ende, traerá consecuencias impredecibles.
Todos los seres vivos, sin excepción, necesitan de agua para poder vivir; y no obstante, los seres humanos no sólo la utilizan para tomar: casi todo lo que hacemos involucra el agua de alguna manera.
El hombre, al ser creado con inteligencia, es el mayordomo o administrador de este preciado líquido. “Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y le puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase.” (Génesis 2:15). Como podemos observar del versículo bíblico, esa misión que le otorga Dios al hombre, “ser el mayordomo de la naturaleza”, lo compromete a cuidar de ella y le da también, la facultad de decidir con los elementos que la forman; por consiguiente, es una responsabilidad que al hombre no acatar como debe, transgrede los principios divinos, y por ende, traerá consecuencias impredecibles.

Esta información fue corroborada por expertos en la materia, quienes vaticinan una escasez del preciado líquido en las próximas décadas, y esta escasez, traerá desequilibrio en algunos países que son de interés a esta nación. Por lo que altos ejecutivos de la CIA (Agencia de Inteligencia Americana) consideran que el agua no es sólo una cuestión de salud pública, ni sólo de desarrollo económico y/o ambiental, sino una cuestión relativa a la paz y a la seguridad, por lo que consideran que el control de la misma, es un asunto de “seguridad nacional”.

Según estudios, el total del requerimiento global de agua al año es más de cuatro billones de litros, (este análisis está basado en datos no exactos del consumo individual y el agua que se necesita para cultivo). Imaginemos si añadimos: el agua que se utiliza en los lavadores de auto, piscinas, parques de diversiones, y máquinas de lavar ropa.
Se calcula que, 800 millones de personas en el mundo no tienen acceso a fuentes seguras de agua potable. Y la comunidad científica considera que esto es debido a los cambios climáticos globales que experimentamos. Lastimosamente, la amenaza de quedarnos sin agua potable va en aumento a medida que pasan los años. Por consiguiente, la concienciación a nivel colectivo e individual sobre, cómo
ayudar al medio ambiente, es de extrema urgencia, si no queremos correr un riesgo innecesario; ya que de acuerdo a un estudio internacional, para el año 2,030 el requerimiento de agua potable a nivel mundial aumentará en un 40 % por encima del actual suministro sostenible de este líquido. Por inferencia a ese estudio, ¡si no se activan eficientes manejos de control para mitigar este problema ahora, la disponibilidad de agua dentro de unos años, simplemente no satisfará la demanda global!



- No dejemos el grifo del agua abierto mientras nos cepillamos los dientes o afeitamos.
- Llena la lavadora y lava vajillas a su máxima capacidad cada vez que las utilices.
- Riega el jardín temprano en la mañana o al anochecer para evitar la evaporación del agua.
- Vigila el estado de las llaves de tu casa y repáralos si gotean.
- Cierra la llave de la regadera mientras te enjabonas.
- Tira los papeles y desechos en el bote de basura y no en el inodoro.
- Utiliza un plato hondo para lavar frutas y verduras y aprovecha esa agua para regar las plantas.
- Lava tu auto usando una cubeta, ya que gastas mucho menos agua que cuando lo haces con la manguera.
Terminaré este tema con una vieja y muy conocida locución radial que usualmente se transmitía en mi país natal, con el objetivo de concienciar a la población en general: ¡EL AGUA ES VIDA, NO LA DESPERDICIES!...
¿Y tú, contribuyes al deterioro o al mejoramiento de los recursos naturales?... Recuerda que, si no eres parte de la solución, te conviertes en parte del problema.
¡La gracia y las bendiciones de Dios sean contigo!
Frank Zorrilla